Un breve repaso de las casas de
videojuegos más emblemáticas que funcionaron en nuestra ciudad en los años
noventa. Te invito a embarcarte a este viaje pleno de nostalgia por esos
establecimientos de finales del siglo pasado.
Las máquinas
de videojuegos a ficha o monedas son una de las tantas formas de
entretenimiento y negocios que han desaparecido al paso del avance de la
tecnología y la accesibilidad. Yo empecé a ser asiduo concurrente de estas
casas allá por el año 1995, cuando tenía doce años y andaba siempre deambulando
por Villa Elisa en búsqueda de aventuras montado en mi bicicleta.
Yo era
especialmente habitué de Lalo, que estaba sobre la avenida Américo Picco casi
Guavirá, donde el juego de culto era Mortal Kombat. Allí atendía la madre de
Lalo, doña Margarita, con su nieta María Eugenia, quien ahora vende en el lugar
deliciosas hamburguesas caseras.
![]() |
Lalo,
un verdadero templo para los gamers villaeliseños de mediados de los
noventa.
|
El otro era
Chile Sur, también sobre Américo Picco, pero bien “en el pueblo”, como decíamos
antes, a unos pasos de la municipalidad y del actual Paseo de los Ilustres. Esa
era entonces la única cuadra de camino interno asfaltada de Villa Elisa.
Esta era la
casa con más diversidad, donde los juegos más populares eran Mortal Kombat y
Street Fighter, ambos también éxitos de taquilla en sus respectivas versiones
cinematográficas.
![]() |
Uno
de los lugares pioneros en la ciudad fue el desaparecido Chile Sur.
|
A pocas
cuadras estaba Jovino, al costado de la plaza Von Poleski, sobre la calle
Mariscal López casi Virgen del Carmen.
El local más
escondido era Don Rey, en Venezuela casi Colombia. Aquí también se juntaba la
cofradía de los adeptos a Mortal Kombat.
De este lugar me queda un recuerdo poco grato. En una ocasión, iba para lanzarme en bicicleta a la pendiente que está en la otra cuadra, la que termina en la calle José Asunción Flores, cuando repentinamente escucho que Gustavito me grita.
![]() |
Jovino,
un emblemático local de juegos frente a la plaza que sigue
funcionando en otro rubro.
|
-Vení, rápido, estoy ganando –exclamó entusiasmado.
Frené bruscamente, giré, puse la patita y dejé la bici en la vereda. No había tiempo de ponerle la cadena. Le ganó a Goro y luego debía enfrentar al jefe de todos, el hechicero Shang Tsung, quien se comía el alma de quienes había derrotado, por lo que tenía el poder de adoptar la apariencia y los poderes de los luchadores vencidos.
Gustavito jugaba, como la mayoría lo hacíamos entonces, con Liu Kang, también el héroe en la película, cuya trama gira en torno a una competencia de artes marciales a muerte para salvar la tierra.
Agónicamente, en el tercer round, logró que la bola de fuego de Kang dara en el blanco aplicando el golpe de gracia. Tsung cayó para no levantarse más. Ya no dio tiempo para el Fatality. Estallamos de alegría. Contemplábamos extasiados la ceremonia y los honores al campeón del torneo.
Sin embargo, la alegría no duraría mucho para mí, pues al salir me encontré con que mi bici ya no estaba. Me puse a correr y la busqué por todas partes, pero sin resultados. Caía la llovizna y anochecía mientras yo seguía deambulando sin rumbo. Aquella sería la última aventura que viví con ese gladiador de dos ruedas.
![]() |
Don
Rey, lugar al que hice mi último paseo en aquella bicicleta Fera USA
azul.
|
3 comentarios:
Gracias amigo, por recordarte de Chile Sur, yo atendía en ese lugar , teníamos juegos de aviones , de carreras, de fútbol, por supuesto los Mk 1 2 3, y todas las versiones de Streets, en fin ,una gran época.
No recordaba con tanto detalle los juegos ni me acordaba que había tantos.Exactamente. Una gran época sin dudas. Gracias por el aporte.
Que grande
Publicar un comentario